¿Os acordáis de las Pajaritas?…
-¡Qué buenas!.
Dicen que es una tradición de tiempos inmemoriales, y su objetivo inicial era, que a ningún niño pueblano por Navidad le faltara mazapán.
Las clases se decoraban con tiras de mil colores, bolas de navidad, postales navideñas y belenes, cuyas figuras cambiábamos de posición mil y una veces, en cuanto se daba la vuelta el maestro. Al «cagón» lo teníamos mareado. Panderetas y tambores marcaban el ritmo del apresurado villancico, que siempre se entonaba. Apresurado, porque sabíamos que después de nuestra interpretación venían las Pajaritas. Nuestras cabezas y miradas, no estaban precisamente en el villancico, ni con el maestro. En esos momentos, nuestros pensamientos y miradas estaban clavadas en una gran cesta de mimbre con cientos de bolsas de pajaritas . Adorábamos nuestra bolsa de pajaritas.
Pero como niños, a veces no siempre, la preciada bolsa moría en su intento de llegar intacta a casa. En casa no había preguntas al respecto….sobraban las palabras…
Las Pajaritas regresaban puntualmente todos los años, con 15 días de vacaciones, con familiares, con juegos, con diversión y con los tan esperados y escasos pero agradecidos regalos de Reyes.
-¡¡¡¡Benditas Pajaritas!!!!…
Como curiosidad, publicamos estos artículos «Crónicas de la Provincia 1972 » facilitado por D.Ángel Arribas, otro del Blog Pueblana y una referencia sobre «las Pajaritas» realizada por D. Benjamín de Castro en su libro «El ayer y el hoy …en La Puebla de Montalbán»